Tubo de escape simple |
El tubo de escape de un vehículo tiene como finalidad
evacuar los gases que origina el motor de combustión al exterior del vehiculo.
También tiene como cometido la amortiguación
del ruido que genera, asegurando un mejor rendimiento del motor, reduciendo asimismo,
la temperatura y la contaminación que generan los humos expulsados.
El tubo de escape consta de un colector que recoge los gases
de salida de los cilindros y se prolonga por un terminal de evacuación hasta
llegar al silenciador, que tiene como misión amortiguar y reducir el ruido y
los gases contaminantes por filtración y por catálisis, mediante un filtro
especial de partículas y un catalizador.
Normalmente, los motores solo llevan una salida de escape
por cilindro. En algunos vehículos, generalmente “tuneados”, un motor puede
llevar varios escapes por cilindro, que se justifica principalmente por una
cuestión de estética.
En tubo de escape aumenta la potencia del motor si es excesivamente
libre, pero consume y se calienta mucho más, por el contrario, si está bastante obstruido, le faltará
potencia
En los motores de dos tiempos, el tubo de escape va
íntegramente ligado al funcionamiento del cilindro, en ellos el tubo de
distensión permite mejorar la compresión
y el vaciado del cilindro
Los motores con turbocompresor por lo general tienen todos
sus escapes agrupados en uno solo con la finalidad de tener que valerse de un
único turbo. Los vehículos de gama alta que tienen gran número de cilindros
pueden llevar varios escapes independientes.
Un tubo de escape "tuneado" de Akrapovic |
En pocas palabras, el tubo de escape constituye una pieza
fundamental para el buen funcionamiento de un motor de explosión, pues sin él
no se podrían conducir y catalizar los gases emanados, el ruido seria
insoportable y fuera de toda normativa, y perdería a la larga la potencia y
velocidad que proporcionan una buena conducción y canalización de los gases del
motor.